Yo ya me canso de las opiniones gratuitas de la gente, así en general, que no te van ni te vienen ni les conoces ni nada. De las opiniones de conocidos y amigos y familia también se cansa uno, pero menos, porque les conoces, los asumes, les quieres, y a veces hasta les pides el consejo. Y oye, que yo también los doy, en las conversaciones de amigos, no a la madre de la cola del súper ni al padre del parque. Que digo yo que si le dan chupete al crío, no se lo quitan aunque tenga más de tres años, siguen con la teta a los cuatro o dan el biberón desde que nació la criatura, a mí, plin. Pero plin de plin.
Otro tema es si lo que hace su criatura tiene que ver con la integridad de la mía, pero si no... Plin!!!
Lo triste es que las de un lado y el otro (si es que hay lados), incluso las de tierra de nadie y las que somos unas inconstantes o ni chicha ni limoná, nos quejamos de lo mismo.
Y venga respeto por aquí y por allá. Pero de boquilla, que la práctica es otra cosa. Una buena amiga cuando me quedé embarazada del los mellizos me dijo: "sólo te daré un consejo que no has pedido, ni caso! Ni siquiera a mí". También es verdad que luego me regaló un libro de crianzas que le había encantado dedicado y con todo el amor, jajaja. Pero no me lo tomé a mal porque cuando te dan consejos, aunque sean gratis, con cariño y sin juzgar, se nota y se agradece.
Yo voy a la mía, y cambio de modelo cuando me place y según soplan mis hormonas, mis humores y las situaciones, más que nada porque como decía antes, una cosa es saberse la teoría y otra, aplicarla.
Pero oye, quitando casos de maltrato y barbaridades varias, aquí todas lo hacemos estupendamente, porque nadie quiere más a tus hijos que tú misma. NADIE. No, la cajera del súper, la abuela del bus y la vecina del quinto tampoco.
Francamente, a mí me parece que lo hago todo mal en todo momento, ya lo decía mi madre... Haz lo que te parezca mejor porque hagas lo que hagas estará mal... cuando riño porque debiera haber sido más comprensiva y cuando comprendo porque soy una tibia. Que si verduras obligadas, mala. Que si que coman lo que les traiga al pairo, mal. Si sigo las indicaciones del cole y les hago leer en casa estando en P5 y recién cumplidos los 6, mal. Si no, mal también porque vaya cargo de conciencia llevar la contraria a toda la clase y la profesora. Extraescolares sí, o no! Deportes individuales o de equipo. Manualidades, música, fiestas de cumpleaños, regalos, todo tiene sus teorías, dimes y diretes.
Pero oye... Que mi pediatra dice que quien hace lo que puede no está obligado a más. Y al final... A MÍ PLIN!!!
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